Alternativas para una compra más sostenible

Para reducir el impacto medio ambiental es necesario actuar en todas las etapas, desde el origen hasta el hogar. Dentro de ese recorrido que hacen los productos que consumes día a día, el supermercado es uno de los lugares donde se puede marcar la diferencia.

La reducción del desperdicio alimentario es clave para asegurar la sostenibilidad de nuestro planeta. El desperdicio de alimentos puede producirse en todos los eslabones de la cadena, pero, juntos, podemos dar una respuesta a un problema que nos afecta a todos.

Otra de las razones que hay detrás del desperdicio alimentario es que muchos productos se tiran porque se encuentran cerca de su fecha de caducidad. El miedo a que no se estén en buen estado o a que no dé tiempo a consumirlos antes de la fecha marcada también hace que se opte por otros. Para evitar esto, en EROSKI los ofrecemos a un mejor precio. Hemos incorporado una etiqueta de desperdicio cero en productos frescos, que aplica un descuento del 10 % y, si combinas dos o más productos hasta el 40%.

Apuesta por la acción solidaria

En EROSKI seguimos en nuestra lucha contra el desperdicio alimentario. Nos aseguramos de que los productos donados mantengan su cadena de frío también en la entidad receptora de la donación y conservamos las mismas garantías en su transporte e instalaciones hasta que el alimento es consumido.

El criterio de asignación y la entrega final de estos productos al destinatario corresponde a más de un centenar de entidades sociales de todo el territorio nacional con las que hemos firmado convenios de colaboración. Por ejemplo colaboramos con bancos de alimentos, Cáritas, Cruz Roja, RETO, etc. EROSKI dona anualmente más de 4.900 toneladas de alimentos a los colectivos más desfavorecidos a través de este programa. La cifra equivale a más de 9.700 dietas personales donadas.

Como ejemplo de nuestro compromiso por evitar el desperdicio, en EROSKI llevamos 22 años gestionando alimentos de manera responsable y solidaria en colaboración con organizaciones sociales locales, como la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), Cáritas, Remar o Reto. Durante el año 2019 hemos donado más de 6.748 toneladas de alimentos destinados a los colectivos más desfavorecidos. Las donaciones consisten en productos frescos y de alimentación que retiramos para cumplir nuestro compromiso de frescura máxima o simplemente porque su envase presenta una pequeña deficiencia. Todos están siempre dentro de la fecha de caducidad o de consumo preferente y en perfecto estado, ya que hemos desarrollado un protocolo de actuación que vela escrupulosamente por la seguridad alimentaria de los productos donados. En el caso de los frescos garantiza, por ejemplo, el

mantenimiento adecuado de la cadena de frío también en la entidad receptora, que

debe asegurar que cumple las mismas garantías en su transporte e instalaciones.

Trabajamos para minimizar los residuos derivados de nuestra actividad mediante campañas de desperdicio 0, la promoción de productos frescos y la donación de alimentos con fines solidarios.